El autor y director argentino Claudio Tolcachir
regresa al FITC 2013 con una cautivadora y desorientada pieza de escenas de
familia en la coproducción teatral que
hiciera para el Festival de
Otoño de París “El viento en un violín”, la cual podrá ser vista en el Teatro Chacao, los
días martes 26 y miércoles 27, a las 8:00 p.m, a un costo de Bs. 225+ IVA.
Con más de 20 distinciones, y presentaciones en más
de 30 festivales internacionales, el creador argentino Claudio Tolcachir
desarrolla una ruptura del espacio escénico, propuesta apoyada en las
actuaciones, y el eje espacio-tiempo, como unidad convencional que se quiebra
dando paso a una homologación de situaciones diversas que conviven en un mismo
espacio, un espacio que es uno y muchos a la vez.
La sala, la
sala de una casa, una casa de familia; Algarabía con un cuadro humano y cercano
a todos; sucede en Argentina pero pasa en cualquier lugar: Mujeres que se aman,
buscando desesperadamente un hijo. Madres con hijos, desesperadas por
asegurarles la felicidad. Hijos desorientados, desesperados por encontrar su
lugar.
Historias de
seres ricos y pobres buscándose. La vida. Y el amor que lo atraviesa todo. Que
todo lo permite. Lo bueno y lo malo. El amor de pensar la vida de otra forma y
aceptarla tal vez. En nombre del amor.
Claudio
Tolcachir dramaturgo y director argentino nos dará nuevamente lecciones de buen y variado teatro, por
cierto, siempre impregnado de su realidad. Su primera incursión en el campo de
la dramaturgia fue con la multipremiada “La Omisión de la Familia Coleman”,
luego escribió y dirigió “Tercer Cuerpo” que junto
a “El viento en un violín” viene a concluir una suerte
de trilogía que explora las relaciones sociales y familiares.
Ha dirigido
numerosas obras, entre ellas “Orfeo y Eurídice”, de Jean
Anouilh; “Chau Misterix”, de Mauricio Kartun, o “Arlequino”
de Enrique Pinti. Como actor en teatro ha trabajado, entre muchas
obras, en “La profesión de la Señora Warren”, de Bernard Shaw; “Un hombre que
se ahoga”, de Daniel Veronese, y “De Rigurosa Etiqueta”, de Norma Aleandro.
Timbre 4,
cuyo nombre hace referencia al espacio físico teatral, fue creada en 1999 por
un grupo de teatristas con orígenes y formaciones diversas que tuvieron la
necesidad de generar un espacio propio donde poder llevar a cabo sus investigaciones,
entrenamientos y exposiciones.
Hoy, no sólo
funciona como sala teatral, sino que durante toda la semana recibe alumnos de
teatro que entrenan y se forman como actores. El compromiso de la escuela
apuesta por una formación personalizada y específica
que, al mismo tiempo, incentiva en el alumnado la interdisciplinariedad. De
Timbre 4 dicen sus fundadores: “Es una casa. Y la casa es una escuela. Y la
escuela es un teatro...”.
Este nuevo
espectáculo que traen a Caracas sigue las tendencias de la reunión de
voluntades y esfuerzos de organizaciones diversas al constituirse en una
coproducción del Festival d'Automne de Paris, TEMPO_FESTIVAL das Artes, el
Festival Internacional Santiago a Mil y la Maison des Arts de Creteil, con el
apoyo del fondo Iberescena de apoyo a la creación.
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